OBITUARIO DE DOÑA ROSARIO ROMAN RICONDO
(madre de Rosi Castañeira). Leido en el funeral celebrado en la Iglesia Parroquial Ntra Sra del Carmen de Baracaldo el 28 de Diciembre de 2013.
Araltzadeon gustioi agurgarriak. Buenas tardes a todos.
Queridos Rosi, Zoraida, Sendoa, Gorka, Laura, Tomás, Miren, Jesús, Chani, familiares, amigos:
Estamos aquí con vosotros para acompañaros en esta difícil, complicada y emotiva circunstancia generada por la pérdida de vuestra madre, amama, hermana y amiga Rosario (Mentxu).
La muerte en general, y en particular la de los seres más queridos, provoca en todos nosotros un redoble de conciencia que remueve los cimientos de nuestras frágiles creencias en determinadas cuestiones existenciales.
Ante la muerte el hombre identifica al hombre como tal y se identifica a sí mismo como ser humano, porque MUERTE, RELIGION Y SENTIDO DE LA VIDA, son inherentes a la propia condición de homo sapiens.
El martes pasado, Rosi Castañeira enviaba a sus amigos un mensaje que merece la pena leer porque invita a reflexionar y propicia el consuelo. Decía:
La vida es como un viaje en tren. Algunos comienzan el viaje junto a ti, otros se montan a la mitad del camino, muchos se bajan antes de que llegues al final del recorrido, y muy pocos permanecen junto a ti hasta el final…Pero cada una de esas personas dejan algo en tu corazón que siempre recordarás.
Continuaba su mensaje dándonos las gracias por habernos montado en algún momento en el tren de su vida y finalizaba diciendo: Espero que nunca os bajéis…y, si eso ocurre, nunca os olvidéis de mí.
Todos los que hoy estamos aquí, en este recinto sagrado, aglutinados en condolencia por la pérdida de Rosario (Mentxu), y precisamente ella más que nadie, hemos viajado o estamos viajando en el tren de vuestras vidas.
La reflexión que provoca este mensaje de Rosi es que la vida del hombre, como señalaba el filósofo Wittgenstein, es un conjunto de significados a los que haya que dar sentido: EL SENTIDO DE LA VIDA, que nos obliga a tomar una determinada postura ante ella.
Esa es la herencia de Rosario (Mentxu): la dialéctica del buen ejemplo, trasmitida a su prole y a sus allegados, como un patrimonio referencial, como una estela, como una huella cargada de contenido.
Y esta herencia es a la vez orgullo y consuelo. Sois lo que sois, porque ella fue lo que fue…..y esto es imposible olvidarlo.
Quiero acabar con unas palabras del Papa Francisco, discípulo del vasco más universal, Ignacio de Loyola: No llores por lo que pierdes, lucha por lo que te queda. No llores por lo que ha muerto. Lucha por lo que ha nacido en ti. No llores por quien se ha marchado. Lucha por quien está contigo.No llores por quien te odia. Lucha por quien te quiere. No llores por tu pasado. Lucha por tu presente. No llores por tu sufrimiento. Lucha por tu felicidad.
Con la vida vamos aprendiendo que nada es imposible de solucionar. ¡¡SIGUE ADELANTE!!
Cuando a veces parece que ya no podemos más, los arañazos de la vida –como enfatiza el catedrático de Metafísica, Angel Gabilondo-, encarrilan nuestras tareas, no porque sean un estímulo, sino porque exigen una labor, la de curarse. Curarse y cuidarse es recabar el bálsamo de la palabra amiga del otro.
Esto es lo que he intentado trasmitiros, querida familia Castañeira-Roman, con el emocionado recuerdo de Mentxu (Goian Bego), bihotz, bihotzez.
Ricardo Franco Vicario, en nombre de Producciones Solidarias Lizarralde y Compañía, Sociedad Ilimitada